Escritora, redactora y editora del lado infra literario opuesto a la revistilla del montón* – palabras de René Wellek y Austin Warren en su obra " Sobre la Teoría Literaria". Editora en el sitio Masticadores Sur
Los pobres en una mesa apartada del «lujo» a dos pasos de la cocina y de los artículos de limpieza. (Nótese el halo místico de tenor: «comedor popular» a los Margarita Barriendo, incluido el mantel)
No comprendo las loas, los ditirambos, las alabanzas, entre otros sinónimos, que enarbolan en derredor de la obra caritativa de Jon Bon Jovi: Literalmente: en su cadena de restaurantes se sirven comidas a granel «tanto a clientes que pagan como a los que no». (Intuyo que la gente se queda con la primera frase enunciativa y no lee o escucha más alla de las tres primeras proposiciones). Literalmente en la entrevista, el susodicho profiere: «No hay precios en el menú, pero ¹SE ANIMA a aquellos que pueden pagar una comida a DONAR $20. Quienes tienen dificultades económicas PUEDEN comer ²gratis, y también se les ANIMA a ³ser VOLUNTARIOS en el restaurante ayudando a SERVIR las comidas y TRABAJANDO en la cocina.»
TRADUCCIÓN: La gente pudiente paga por los los platos de la gente indigente. Todo esto con el paliativo «ANIMADOS» (o sea, la función apelativa en su versión exhortativa: una órden, mandato y peor aún que la explícita apelativa ya que, la exhortativa funciona desde el chantaje emotivo imprimimos en los receptores el impulso al cumplimiento desde lo moral a través del sentimiento de culpa inducido). By the other hand, la gente indigente, paga su plato de comida «donado» (jamás por Jon Bon Jovi) si no por el lado A de la recua direccionada, no con DINERO pero paga con creces con una moneda peor: la de la horrenda servidumbre.
1-ANIMAR. Del lat. animāre. 1. tr. Infundir vigor a un ser vivo. 2. tr. Infundir ánimo o energía moral a alguien. 3. tr. Incitar a alguien a una acción. Le animó A ir al cine. 4. tr. Dar vida o animación a una obra de arte. 5. tr. Comunicar a una cosa inanimada de vigor, intensidad y movimiento.
2-GRATIS. (Del lat. gratis). 1. adj. gratuito (‖ de balde). del lat. gratuītus. 1. adj. De balde o de gracia2. adv. De manera gratuita o sin coste.
3-VOLUNTARIO, ria. Del lat. voluntarius. 1. adj. Dicho de un acto: Que nace de la voluntad, y no por fuerza o necesidad extrañas a aquella. 2. adj. Que se hace por espontánea voluntad y no por obligación o deber. (Se los anima a ser VOLUNTARIOS es una contradicción en sí misma)
John Francis Bongiovi Jr, nombre verídico de Jon Bon Jovi, en un carnaval de la emulación haciendo de cocinero, servicial y caritativo. (Detrás, los indigentes están esperando para pagar su ración de alimento) Nótese la condición de castigo que conlleva la paga del «pobre» ya que, por tradición, han de lavar los trates de quienes después de haber comido en un restaurante no les fue posible solventar lo ingerido.
Coronamos al evento de solidaridad por antonomasia con un emblemático hit de Jon Bon Jovi
Lisa Simpson no es más que una hipócrita que critica el sistema (todo el tiempo y en todos los aspectos), ah pero tiene asistencia perfecta en la escuela y solo le importa la calificación numeraria como medida parametral de su capacidad, la cual no tiene que ver con la capacidad real de un estudiante. Y bueno… lo podrán constatar en los capítulos que, por ejemplo Alison la supera, porque tiene un pensamiento crítico naturalizado. Y Lisa es llanamente memorística y disciplinada. También, en el capítulo donde Maggie la supera), también con otro tipo de inteligencia) a la que Lisa no llega. Por el simple hecho de que su manera de pensar es por repetición, por memoria y por conducta. En mi humilde opinión, para mí es él, Bartolomeo, quién es realmente inteligente, (sacando a Bob Patiño), sin dudas… Pero Bart sí es anarquista porque rompe estructuras, porque tiene un pensamiento crítico pero no le interesa un pito cumplir con el sistema y bueno. Todo acto tiene sus consecuencias,y en este sistema (precisamente) «nunca va a ser un triunfador ese niño.»
Cuento tradicional con intención didáctica: «El traje púrpura del Rey»
En la historia de la humanidad, donde la dominancia se institucionaliza y deja de ser función de competencia personal, como es todavía el caso en las sociedades primitivas, ya no es necesario que el dirigente esté en constante posesión de sus facultades sobresalientes, y en realidad ni siquiera es necesario que las tenga. El sistema social condiciona a la gente para que vean en el título, el uniforme o lo que sea la prueba de que el jefe es competente, y mientras estén presentes esos símbolos, respaldados por todo sistema, el hombre común y corriente no se atreve siquiera a preguntarse si el rey está verdaderamente vestido.
¿Para qué son fuertes los fuertes? ¿Para ayudarnos?¿O sólo lo son para demostrarnos su fuerza?
«Desconfío de todo aquel que ME OFRECE SU AYUDA. Estoy convencida de que solamente lo hace con el fin de ALARDEAR SUPERIORIDAD.» —Así de miserable puede ser quién se vanagloria de ser humano—
¿DE QUÉ CONVIENE PROTEGERNOS? DOS PREMISAS ENRAIZADAS EN LA CERTEZA: ✓ existe la debilidad ✓ existen los idiotas Hay idiotas que se dedican a serlo con absoluto profesionalismo y así usufructuar con la capacidad de realización otros.
Paradigmas que nos den vuelta la tuerca para salir de lugares INSOSPECHADOS pero no por ello, menos lamentables. ¡Uy! ¿Y SI EN REALIDAD EL IDIOTA SOY YO? ¡No Te duermas como se durmió el CORNUDO! Tené «CUIDADO CON EL CONFORT DEL IDIOTA»: Una forma de ser pelotudo con réditos mediante la trampa de la solidaridad.
COMBATAMOS EL CONFORT DEL IDIOTA ✓DETECTEMOS DÓNDE SOMOS IDIOTAS NOSOTROS, PORQUE LOS PRESUPUESTOS AVANZAN A PASO REDOBLADO, Y PASAN COMO ALAMBRE CAÍDO DELANTE DEL instalado carácter acomodaticio que nos sostiene en la nube de la pelotudez CON EL PELIGRO DE SUCUMBIR PARA SIEMPRE EN LA IDENTIDAD DEL IDIOTA CONGÉNITO. ¿NO PENSÁS EN LA POSIBILIDAD DE ESTAR SIENDO IDIOTA DE ALGUIEN?
¡CUIDADO CON EL CONFORT DEL IDIOTA!: PORQUE AL PAN, PAN; AL VINO, VINO; AL RENGO, RENGO Y, EN DEFINITIVA: TODOS SOMOS IDIOTAS DE ALGUIEN.
Un afecto desde el alma incomoda por la fortuna de la existencia. Buen feriado al orgullo del argentino que se siente afortunado por la conquista española. Sí. Siempre agradece en silencio pero sin caretear la pena que no siente ante los originarios que, de calladitos a, nos dejaron la peor vena intrínseca que nos otorga la distinción: espejitos de colores compraron y ETERNAMENTE habremos de comprar.
Ilustración en honor al «Idiota» de Fedor Dostoyevski.
Destruir instrumentos en escena es un rito propio del rock. Uno de los máximos exponentes de esta maravillosa costumbre, y acaso el pionero, nos revela sus secretos.
AQUÍ, LAS DECLARACIONES DE UN GRUPO PIONERO EN DESTROZO DE INSTRUMENTOS MUSICALES.
Los Who nos hicimos famosos, entre otras cosas, por destrozar los instrumentos al final de los recitales. Esto suponía el climax de un recital, una demostración suprema de rock, que en su furia y su salvajismo, destruyendo la propia música, los propios instrumentos, se destruía a sí mismo. Aunque, en realidad, nosotros lo hacíamos básicamente porque a la gente le gustaba ver un show con acción, de la misma manera que gusta más una película de cine catástrofe que una de esas películas polacas donde no pasa nada. Últimamente también hay peliculas iranies donde no pasa nada. Y si me dan a elegir entre una película así y una de Bruce Willis, no lo dudo. Y la gente tampoco. Así es como funciona el asunto de romper instrumentos y hacer bardo en el escenario. El tema es que muchos quisieron hacer lo mismo después de que nosotros lo inventamos. Pero fracasaron. ¿Por qué? Porque para hacer pelota un instrumento en escena hay que seguir ciertas reglas.
DESTROZAR INSTRUMENTOS: CÓMO HACERLO EN FORMA CORRECTA
Lo primero para asegurarse de romper una guitarra es tener la convicción de hacerlo. Y eso se logra teniendo una guitarra de repuesto, o por lo menos la plata para comprar una nueva.
El que tiene otra rompe con convicción 👇
Tener otra otorga la posibilidad de romper la guitarra con convicción,
El que tiene una única guitarra lo hace en forma tímida, tratando de que se rompa lo menos posible. Cómo pegarle contra el piso 👇
El que tiene una única guitarra lo hace en forma tímida, tratando de que se rompa lo menos posible.
Las guitarras sólidas, es decir sin caja, son mucho más dificiles de romper que las que tienen caja. Yo rompí las sólidas, porque las de caja se rompen enseguida y el asunto del destrozo se termina rápido. La golpeaba varias veces, y la guitarra aguantaba. Hasta que en un momento. cuando sentía que los golpes ya empezaban a aburrir, le daba con cierto chanfle contra el piso, lo que provoca que la guitarra se parta, o por lo menos que el mango se desprenda del cuerpo. Esto da el efecto de guitarra destrozada.
La idea es tomar la guitarra como si fuera un hacha, por el mango. Y darle con el cuerpo contra el piso👇
La idea es tomar la guitarra como si fuera un hacha, por el mango y darle con el cuerpo contra el piso
Al revés no tiene el mismo efecto y es más difícil de agarrar. Hay que cuidar de no tener un pie muy adelantado 👇
Al revés no tiene el mismo efecto y es más difícil de agarrar. Hay que cuidar de no tener un pie adelantado para no perder el equilibrio.
Teniendo muchas guitarras o dinero, romper una guitarra es un acto de rock. Romper la única que se tiene puede ser mucho más rock, pero también es ser un pelotudo.
Así fue como Jimmy Page lo quiso hacer en agosto del 69 y terminó con una bota de yeso y sin poder jugar en un cuadrangular de bandas que toman ácido lisérgico 👇
Demostración gráfica de lo que, en 1989 le sucedió a Jimmy Page.Esta imagen expone la razón por la cual Jimmy Page terminó con una bota de yeso, sin poder asistir al cuadrangular de las bandas aficionadas al ácido lisérgico.
También hay que cerrar los ojos en el momento del impacto y un segundo después del mismo, para evitar que algunos elementos provoquen daños oculares 👇
Ser irresponsable a la hora de destrozar los instrumentos nos puede costar un desprendimiento retinal, en el mejor de los casos.Al cerrar los ojos en el momento del impacto se evita que los elementos provoquen daños oculares.
EL DESTROZO DEBE SER RESPONSABLE
En el rock, la comunión con el público es importante. Por eso no está mal arrojar los instrumentos a la platea, aparte de destrozarlos.
Si se arroja un instrumento al público, hay que amagar un poco antes, para que la gente se prepare a recibirlo y no se sorprenda con una Stratocaster partiéndole d tabique.
En el caso de los bateristas pueden arrojar palillos y bombos. Pero nunca un platillo a modo de frisbee o disco de esos con los que se juega en la playa. Así se aminó la carrera Darrell Oswald, baterista de The Philbys, que aún cumple condena por decapitar a uno que estaba en la tercera fila.
También es fundamental destruir los instrumentos al final del show. Muchos grupos han buscado originalidad rompiéndolos antes de empezar a tocar y se han visto en el inconveniente de no poder dar el recital, lo que los llevó irremediablemente al fracaso.Son muchas las cosas que se pueden hacer en un escenario con los instrumentos o los equipos, pues además de destrozar la batería, prenderle fuego a la guitarra, a los teclados, al saxo, también podés agarrar al bajista y recagarlo a trompadas.
O también meter un jubilado dentro de un baffle de sonido de 300.000 watts y ver qué onda 👇
El público ama estas actitudes en una banda de rock. Son muestra de entrega y autenticidad. Otros géneros como el jazz o la música clásica no lo permiten. En diversos rubros se ha intentado lograr el mismo efecto. Denzel Spilimbergo, un médico veterinario de Manchester, agarraba a los perros por la cola y los sacudía contra el piso después de vacunarlos, para darle una «onda Who» a la veterinaria. Y sabemos de librerías escolares en las que los empleados destruyen con un hacha las Xerox después de sacar una fotocopia, como una muestra de la pasión por su trabajo. En ambos casos la gente censuró el gesto. ¿Por qué? Porque el rock es de los pocos lugares donde se puede triunfar con actitudes enfermas y primitivas lindantes con la animalidad. Por eso es rock.
Se invierte en un estudio propio. Se compra droga y se compra alcohol. Se pagan los impuestos. Se ahorra para cuando se termine el éxito y haya que comprar drogas y alcohol.
¿QUÉ GASTOS PUEDEN SERVIR PARA DESCONTAR DEL IMPUESTO A LAS GANANCIAS?
Gastos de traslados, instrumentos, materiales de estudio. Hay que tener especial cuidado de no poner «Compra de drogas y alcohol» en un formulario de deducción de impuestos.
¿CÓMO PROCEDER SI UN INTEGRANTE DE LA BANDA SE ALCOHOLIZA O SE DROGA DEMASIADO?
Depende de su función dentro de la banda. Si no compone o es el baterista, se lo despide, sin miramientos. En el caso de que sea el lider, el tema es más delicado. Sobre todo si, estando alcoholizado o drogado, debe firmar cheques o es el que tiene el talonario de facturas. Por eso hay que estar atentos a sus movimientos y tener actitudes individualistas. El hecho de que el público lo reconozca más que al resto puede hacerlo caer en la tentación de soñar con quedarse con toda la recadación en lugar de dividirla por cuatro. No hay que olvidar que el lider de una banda es un solista en potencia. Por eso al líder se lo sigue, pero también se lo vigila. No en vano se ha dicho: «Los hombres son buenos pero si se los vigila son mejores (Juan Domingo Perón).»
¿QUÉ HACER EN CASO DE TRIUNFAR Y QUE SE NOS MUERA EL CANTANTE?
Hay diferentes opciones: cambiar el nombre de la banda, llamar a otro cantante u ocultar la noticia y buscar a un tipo bastante parecido.
¿POR QUÉ CUANDO ALGÚN CANTANTE MUERE SE LO VALORA MÁS O VENDE MÁS DISCOS?
No sé. Ocurre en todas las áreas del arte y del espectáculo. Es un aspecto de público que puede ser morboso, necrófilo, oscuro, irracional, imbécil, indigno, bajo y repugnante. Hay que respetarlo.
¿HAY QUE RESPETAR AL PÚBLICO?
No.
¿CÓMO DEBE SER LA RELACIÓN CON EL PÚBLICO?
Hay artistas que tienen una relación entre demagógica y obsecuente, con la carga de miseria humana que ello implica. Sin embargo, esto es lo más recomendable. Una actitud fría y distante puede generar respeto, pero no aporta mucho si hay que llenar River.
¿QUÉ LE GUSTA AL PÚBLICO?
En general, es un misterio, aunque hay cosas que no fallan: que el cantante aplauda al público, que les diga que los ama, que les diga que son el verdadero espectáculo; si es extranjero, que salga con una bandera argentina o una camiseta de la selección; saludar a la ciudad: «Hola, Buenos Aires», «Buenas noches. Berazategui», «Buenas noches, Quilmes». «Buenas noches, Temperley». El público ama al artista. Quiere, entonces, que el artista lo ame. Este fenómeno no sólo le da calor y emoción al recital como hecho artistico que se convierte en ritual, sino que también es causal de que el artista quizás, después del show, se coja a alguien.
¿POR QUÉ EN MUCHAS RESPUESTAS HAY UNA OBSESIÓN CON EL HECHO DE COGER?
Llegué al punto álgido de la tolerancia con los personajes del sistema educativo que, a través y su rol de actantes dinámicos, promueven el lenguaje inclusivo sin considerar obligatoriedad que conlleva su rol de educandos, con respecto a la responsabilidad, no solamente civil para con el educando, sino con la implicancia más sublime en derredor de la evolución procesual de la arquitectura de los puentes cognitivos que se establecen en el circuito neuronal psicolinguistico de los seres humanos, en general y sobre todo el de los aprendientes en etapa de crecimiento madurativo del aspecto cerebral cognitivo.
El lenguaje con sus complejidades etimológicas y se, es una de las principales aristas a través de las cuales el ser humano desarrolla el fortalecimiento de las estructuras cognitivas.
Sopena, el carácter inimputable que se le ha otorgado a gran franja los educadores, en el permisivo acto negligente respecto a los comportamientos pedagógicos en boga relacionados con las acciones baladíes de la moda inclusiva, que supedita los enseñantes bajo modo enseñanza que dejan de lado la integridad de los aprendientes, por el acto irrisorio poner en primer plano prácticas deliberadamente arbitrarias perjudicando a los menores a cargo. En primer lugar, el lenguaje inclusivo, no tienen un fin relacionado con la real de la ruptura.
Lamentablemente, siquiera pueden considerar, que exponen de manera contradictoria sus falencias y su carácter hipócrita, desnudando su debilidad ante los aprendientes que rumiando y mascullando la estupidez del adulto irresponsable inaudito y déspota, sigue siendo víctima de generaciones irremediables.
Es ineludible, a través de los manifiestos que se concatenan con lexemas inclusivos, «el no decir a través del no decir». La ilegibilidad de los discursos y la imposibilidad de reproducir oralmente lo discursivo gráfico, es la prueba más contundente de la falacia más deleznable, que por insignificante es aún más deplorable.
Es tal la necesidad de manifestar una ruptura inexistente del patriarcado, tanta cinismo malogrado para demostrar lo que no son, que conforman un conglomerado de vocablos inexistentes para solapar su imposibilidad y su negación a la ruptura.
Ruptura que solamente será posible, a través de la acción y jamás a través de la deformación de las prácticas discursivas.
La verdadera ruptura se relaciona con la generaciones procedentes, de las cuales están haciendo caso omiso, vituperando sus derechos con la enseñanza que se corresponda con sus necesidades procesuales en el fortalecimiento de las cognitivas, entre otras.
La amabilidad la dejé de lado. La mala praxis debería de ser tan condenatoria en la medicina como la educación.
Nací docente por oficio y moriré docente yendo en contra de cualquier precepto que haya de perjudicar la salud física o psíquica de los menores.
Mamá luchona es perseguida por no someterse a una maternidad abnegada. Mamá luchona es el nuevo estigma que señala a las adolescentes madres por pobres, por putas, negras y todas las pautas discursivas de un patriarcado que liga sexismo, racismo y clasismo en una sola figura: mamá luchona. La piba que aunque madre, sale de joda, una fanática de los boliches que no declina su derecho a la noche.
Qué es una mamá luchona. Según un usuario joven de Internet una mamá luchona es una “villera sin marido, que deja a sus críos con sus madres y con la asignación de sus hijos se va a comprar un shortcito 2 talles más chico”. El concepto apareció hace un par de años en México y llegó a la Argentina poco después. El patriarcado lo dio vuelta, de la autopercepción reivindicativa pasó a la estigmatización. Sobre las madres jóvenes recae toda la responsabilidad de la ma(pa)ternidad, la mamá luchona es madre y padre a la vez, es una mamá leona, sostén de familia, es resiliente y frente a la adversidad construye una madre todoterreno. Las luchonas son madres adolescentes, de sectores populares, sin pareja con quien compartir la crianza y, el rasgo que más enfurece al patriarcado: son jóvenes que no declinaron sus ganas de salir de noche y de divertirse. La persecución a las mamás luchonas, la burla y el estigma circula entre pibes y pibas usuarios de Internet, en canciones, en memes, un indicio de una nueva inquisición que no viene de arriba. Los pibes y pibas que acusan a la luchona, sin embargo, lo hacen en el mismo tiempo y lugar que se expanden las campañas contra la ideología de género, que se limitan los derechos sexuales y reproductivos, que ganan incidencia política las Iglesias católica y evangélica, que se cuestiona la Educación Sexual Integral y se reduce el presupuesto público destinado a políticas orientadas al género. Crece una ofensiva misógina que tiene en los jóvenes la alianza menos esperada. Y la mamá luchona, piba y pobre, es otra vez la más perjudicada.
Luchona madre adolescente Según datos de UNICEFen la Argentina el 15% del total de nacimientos de 2016 (111.699 de 770.040) son de madres adolescentes. Ese porcentaje se eleva al 20% en provincias de NOA y NEA. Los contextos de vulnerabilidad y el nivel educativo son determinantes centrales: 75% de las madres adolescentes de 18 y 19 años no había terminado la escuela secundaria. Pero no todos los embarazos adolescentes no son planificados, un 39,2% sí lo son. Se estima que América Latina es la segunda región del mundo con mayor cantidad de embarazos en niñas y adolescentes, luego del África sub-sahariana. En la Argentina contar con un panorama completo es difícil porque las mediciones estatales no incluyen embarazos que no llegan a término por abortos voluntarios o involuntarios, sí se sabe que solamente el 43% de las mujeres y 28% de los varones adolescentes tienen acceso gratuito a los métodos anticonceptivos que utilizan.
Según el mito de la mamá luchona, las jóvenes madres llaman a sus hijos “bendiciones”. La maternidad aparece asociada a la máxima realización de la mujer o a una bendición divina. Una aceptación redentora incomprensible para quienes no habitan esos cuerpos. La representación religiosa de la maternidad como milagro, presente en muchas creencias populares y en especial en el catolicismo funciona en estos casos borrando los conflictos y las faltas del Estado. Una mamá luchona de 16 años tiene dos templos: el baile y la Iglesia, que si bien ha funcionado como barrera para el acceso a educación sexual, contiene en los barrios a las pibas desesperadas.
Luchona sin ESI ni aborto legal Agustina no llegó a mamá. Murió en un hospital de El Sauzal, en Chaco, después de haber cursado siete meses de embarazo, tenía 13 años, era wichi y no iba a la escuela. Agustina vivía con sus abuelos hasta que supo de su embarazo. Cuando se enteró, se mudó con el novio, de 18 años. Agustina fue 3 veces al hospital más cercano a controlar su embarazo. Nadie le informó sobre la legalidad del aborto en caso de que la vida o la salud de la persona gestante corra riesgo. Ella volvió al hospital con neumonía, desnutrida y con una infección. Le hicieron una cesárea, murió el bebé y ella al día siguiente. Según la Multisectorial feminista de Chaco, “el caso de Agustina se encuadra perfectamente en el término de feminicidio, por la inactividad del Estado para la prevención de esta muerte evitable. Porque a Agustina, desde su hambre y desnutrición, hasta su derecho a interrumpir su embarazo, sufrió una cadena de violaciones a sus derechos, y la privaron del primer derecho humano, el derecho a la vida”.
Agustina se fue de la casa de sus abuelos cuando mostró su panza. Aun con 13 años, la maternidad prometida la convertía en mujer. ¿Sabía que podía evitar ese embarazo? ¿Quería? Según el informe Rompiendo Moldes, elaborado por Oxfam en 8 países de la región, el 72% de mujeres y hombres entre 15 y 25 años creen que es incorrecto que una mujer interrumpa un embarazo no deseado y el 77% de las mujeres y hombres jóvenes están de acuerdo con que todas las mujeres deberían ser madres.
A los pocos días, en Tucumán más de la mitad de los legisladores respaldó un proyecto de ley que contradice el Código Penal y pretende elimina una de las causales del aborto no punible mediante la prohibición “de la discriminación al niño por nacer gestado por causa de violación”. Esta iniciativa intentaba eliminar en Tucumán el derecho de niñas, adolescentes, personas trans y mujeres adultas a no continuar un embarazo producido por una violación. Las comisiones de Familia y de Derechos de la Mujer de la Legislatura de Tucumán rechazaron el proyecto de ley por unanimidad.
Para Mujeres X Mujeres, Católicas por el Derecho a Decidir, Amnistía Internacional, CELS, ELA, Redaas, CEDES y Espacio Intercátedra de la Facultad de Derecho de la UNT, el proyecto forma parte “de estrategias políticas destinadas exclusivamente a confundir a la ciudadanía e imponer un mensaje acorde con una moral sexual restrictiva —propia de sectores fundamentalistas— que se oponen a la secularización de los planes de vida auto-gobernados y a la construcción de una ciudadanía plena para todas las personas. Y contribuyen al mismo tiempo a que los efectores de la salud denieguen ilegalmente abortos que son legales”, según expresaron en un comunicado conjunto.
Mamá luchona con asignación y sin derechos El Estado fabrica embarazos adolescentes. Mientras se restringe el acceso a información sobre derechos sexuales y reproductivos, en el presupuesto de 2019 hay una caída de 19,1% del total asignado a programas que contienen políticas destinadas a género en comparación con el presupuesto vigente de 2018. Pero además de bajar el gasto, lo adjudicado no se ejecuta: en lo que va de 2018 sólo se ejecutó el 24,2% del presupuesto del Programa Desarrollo de la Salud Sexual y la Procreación Responsable de la Secretaría de Gobierno de Salud.
Además, en 2019 el programa que ayuda a completar los estudios y capacitarse en algún oficio, Hacemos Futuro Juntas (anteriormente Ellas Hacen), tendrá una pérdida de un 24% en términos nominales mientras que en términos reales implica una pérdida del 44%.
Pero la mamá luchona, que le gusta la fiesta y andar suelta de ropa, cobra asignación por cada bendición. Según la ANSES en diciembre de 2018, aquellas que reciben ayuda por hijx o embarazo van a cobrar $1.826 por cada niñx. Este es el punto que más indigna a los detractores de la mamá luchona, que se divierte con “la plata de los impuestos”. Una actualización en clave de género y de raza del desprecio por “los planeros”, la mamá luchona sufre un estigma sobre otro: pobre, negra y mujer.
Sin autonomía económica, sin educación sexual integral ni general, sin información sobre acceso a abortos seguros, sin presencia del Estado, las adolescentes madres dependen únicamente de sus madres, y en el menor de los casos de sus parejas varones. En este contexto, ¿cómo no ser una mamá luchona que sale de joda?
Luchona de joda es mala madre Melina Romero tenía 17 años cuando fue asesinada. Es una de las 277 mujeres víctimas de femicidio en la Argentina durante 2014. “Una fanática de los boliches”, así la describió el diario Clarín cuando aún no había aparecido su cuerpo envuelto en dos bolsas de basura. Al editor del diario le pareció apropiado dar cuenta del estilo de vida de la chica recientemente desaparecida, que era fanática de los boliches, que abandonó la secundaria. La noticia construyó así una “mala víctima”, que a diferencia de la “buena víctima”, algo hizo para merecer su tragedia. Melina se la buscó. Tiene culpa por no ir a la escuela, por salir de noche, por buscar expandir su sexualidad, emborracharse y drogarse, salir del espacio doméstico y todo el rosario de culpas que recaen también sobre las mamás luchonas. Sobre ellas se pronuncia un juicio moralizador que viene de todos lados, de la Iglesia, de los medios de comunicación y también de sus pares.
Gayle Rubin identificó jerarquías de valor sexual y un pánico moral a la “sexualidad mala, anormal, antinatural, maldita”. Ya en 1989 decía que la relación que las derechas establecen entre “la sexualidad fuera del matrimonio y el comunismo no es nueva”. El pánico moral y sexual reprime, recorta lo aceptable. Una piba no debería usar su cuerpo como instrumento de valorización social porque eso la convierte en estratega comercial de su cosificación, ni debería buscar su propio placer. Y si una piba suelta no debería, menos debería hacerlo una que es madre. “La mama luchona se destaca por ser villera, y le gusta chupar todo tipo de cosas, tanto pijas como vinos”, dice un usuario de Taringa. Villera, puta, borracha: mala madre, todo lo que está mal.
Luchona es soltera Mamá luchona anda de joda y se gasta los 2.000 pesos de la asignación en divertirse. Anda por su barrio, que es la extensión de su casa. Cuando sale se cruza al vecino que la tocó de piba, al padrastro que la entregó, al amigo que vende, al primo que es chorro. Un territorio donde todos son respetados menos ella. La mamá luchona es soltera. Los espacios donde se dan las violencias machistas de forma privilegiada en adolescentes son espacios públicos y de esparcimiento: los bares, boliches y la calle misma. Muchas mujeres jóvenes encuentran a su agresor en su mismo barrio, podría ser su vecino, el tío de una amiga. En los barrios muchas veces la división entre la vida privada y la pública se difumina y la plaza, la vereda, pasa a ser espacio común y a la vez espacio primario. Son chicas que están expuestas a una trama de violencias que se asienta en un continuum comunitario y en un pacto machista. Esas pibas, dispuestas, engreídas, vulnerables, son propiedad comunitaria de los machitos de la barriada. Ser madre, joven, sin querer o queriendo, y querer aun así divertirse es blanco perfecto para el desprecio que esconde el chiste: mamá luchona. Ahora, ¿cuál es la forma despectiva para nombrar al pibe que abandona a una chica embarazada?
Sin ESI, sin acceso a abortos seguros, sin trabajo, con asignación que apenas alcanza para gastos accesorios, pobres entre los pobres, las mamás luchonas son blanco de mandatos patriarcales que salen de abajo de las piedras. Las madres adolescentes deberían estar en la casa sacrificando su vida a una maternidad bendecida. Sin embargo constituyen fugas del estigma y, en muchos caso, levantan el mamá luchona como bandera.
Dejar de usar este tipo de despectivos si es verdaderamente una actitud de ruptura patriarcal.
🎶This is the way to say: «no seas como Wally. No seas ni latente ni patente… Empero, ante todo, debés no ser patente… No ser sujeto expreso. Quizás sujeto tácito o desinencial.
Serás el distinto, el que está cargado de connotaciones que te son inherentes, ajenas, indistintas, impropias, en menor escala porque a mayores se elevan indestructibles paradigma insospechables, tal vez jamás captchating no por rumores ni por despistados vocinglero de valses al dictado.
En definitiva, si hay algo de este estereotipo, cliché, leitmotiv, ícono, significante, índice, motiv, tópico intrínseco a tu vena constitutiva… Será tu deber, por buen gusto ante la respuesta despectiva de quienes cobran de víctimas ante la dinámica unidireccional v y dispara ingenuos estímulo-respuesta en los pobres adoctrinados que odiarán por imposición y también por propia elección…
Y a vos Wally Punkito … ¿Estás pensando en la Cresta, en el gel del flequillito?
Esa bocha que te hacen sentir La Revolución placebo… En el pogo más fantasma del Imperio. Vestite como Wally… A ver si te dan el metal de estrofas como a los Walys… Que cargamos con todas las entidades que los cool no construyeron…
Los ideales de belleza han ido evolucionando a lo largo de la historia y, lógicamente, la moda se ha tenido que adaptar a esos cánones. Mientras la indumentaria de los hombres se iba simplificando hasta quedar en un traje de tres piezas (pantalón, chaqueta con chaleco y camisa), el de las mujeres se complicaba más […]
¿Podrían hacerme el favor de dejar de lado, aunque sea por un instante, su amor por la mediocridad?
No lean para identificarse. Lean para complejizarse.
No lean para decir “tal cual, a mí me pasó lo mismo”. Lean para decir “qué maravilla, nunca lo había pensado en esos términos”.
Abandonen la linealidad. La palabra simple. La retórica estúpida, menor y sin gracia de la sobreactuación costumbrista del pibe de barrio o de la piba buena onda que «comprendés» y «te comprende».
Desprecien lo previsible. Desprecien lo monocorde.
La poética stand up repta, no vuela. Se arrastra, se humilla. Vive postrada. La poética stand up es poética sin poética.
Elijan la sinuosidad de la metáfora. El vértigo. Desajusten sus sentidos.
Vibren. Sangren. Mueran. Rompan.
No busquen espejos. No busquen oasis. No busquen calma.
A principios del siglo XX, empezó a publicarse en Francia uno de los primeros cómics obra de Pichón y Caumery, cuya protagonista se llamaba Bécassine¹; uno nombre un poco extraño para una muchacha. que con sus aventuras resulta bastante simpática. En francés la palabra bécasse¹, y su diminutivo Bécassine², designan, en sentido estricto, unas aves […]
¿Frivolizar el malditismo? ¿Reducirlo a mera pose o recurso literario?
¿En serio?
El día que te apaguen un micrófono porque tus versos les resultan «insoportables»; el día que no puedas leer tu producción en la mayoría de los sitios «disponibles» porque lo que decís no le gusta ni a la derecha, ni al peronismo, ni a los troskos, ni al feminismo, ni a los anarkos, ni a los veganos, ni a las revistas literarias en las que te encanta publicar tu brillantina; el día que por tu obra pierdas laburos, te comas amenazas, te censuren en las ferias o los vecinos de X pueblo llamen a la Secretaría de Cultura para que bajes de un escenario; el día que en tu obra controviertas al poder y no trances ni una coma con el statu quo; el día que te des cuenta que tu obra es del pasado mañana y que no hay nada más bello que un ano infundibuliforme; el día que te pinchen un teléfono por un poema, se te suiciden compañeros y hagan hasta lo imposible para callarte la boca;
Al hablar tus palabras quiebran el tórax cóncavo de inquieta paloma. Sí, me tiembla el texto o me agrieta el pecho cuando dices: pelvis o garganta en ardiente ágora. Amapolas inexorables, vientre y fuego de los sauces. Cliché del otro extremo, tan forzado como dueño del evidente averno. Agujas de mantra tarotista Sublime negación de […]
Hay problemas de definición que impiden estimar el porcentaje exacto que corresponde a la raza blanca en la Argentina, pero la cifra debe estar por encima del 90%. Esta realidad ha cultivado el sentimiento de superioridad que lleva a los argentinos a creerse europeos y no latinoamericanos. Sin embargo, el desarrollo político y económico del pais no ha correspondido a esta autopercepción un tanto exagerada y como consecuencia, ha generado un profundo sentimiento de inseguridad.
Una característica, de profundo impacto en la vida política, es el excesivo individualismo que proviene, en gran parte, de la obsesión con el sentido de la dignidad personal propio de las culturas latinas. El comportamiento agresivo para manejar (durante años no existieron señales de tránsito en Buenos Aires), el rechazo por la disciplina de esperar turno en una cola y un estilo futbolístico que exalta el brillo individual y la improvisación en detrimento del juego de equipo, son algunas de las manifestaciones de esta tendencia. Cada argentino, no sólo tiene sus propias ideas políticas, sino que está convencido de la sabiduría irrebatible de las mismas. Como resultado de ello rechazan la posibilidad de compromiso y tienden hacia extremismos retóricos y y de comportamiento. Estos factores, unidos a la enfermiza suspicacia que los argentinos tienen por sus compatriotas, limita dramáticamente la viabilidad de las instituciones democráticas y conlleva una predispo posición hacia formas autoritarias de gobierno.
La Pampa
El aislamiento geográfico es otro elemento clave que condiciona le psique argentina a traves de dos factores alienantes. El primero es la distancia tremenda que separa a la Argentina del resto de la civilización occidental. La ciudad de Buenos Aires está situada a más de 9.000 kilómetros de Nueva York y casi a 11.200 kilómetros de Paris. Los argentinos tienen una tendencia a percibir Europa y Estados Unidos, través de una lupa que distorsiona la importancia tanto de los acontecimientos como de las opiniones, lo que produce en ellos la perdida de perspectiva y reacciones paranoicas cuando los extranjeros los critican o los ignoran. El segundo es el sentido de soledad que impone la intensidad de la Pampa. El porteño se siente aislado al borde de una llanura inculta y alejado de los centros culturales y del poder; por su parte, el y habitante del campo se encuentra perdido en la chatura de la pampa interminable. El resultado es una sensación de impotencia y fatalismo, de tristeza y frustración, temas que el tango a menudo insinúa en sus estrellas.
Ligada a esta soledad espiritual de las argentinos hay una profunda sentimentalidad. Los argentinos aman al débil y al fracaso Algunos de los políticos más venerados fueron en su época perdedores que lucharon infructuosamente por ideales imposibles.
Por ejemplo; El cantor de tangos Carlos Gardel, quien fuera victima de un accidente fatal de aviación en 1935, sigue siendo un idolo cuya popularidad aumenta. (De Gardel se dice: «Cada día canta mejor.» Su tumba, situada en el cementerio de La Chacarita, está siempre adornada con flores de sus leales admiradores. Una estatua de tres metros de alto, en pose y sonriente, lo presenta listo para irrumpir con una canción y tiene siempre un clavel natural en la solapa.
Este poderoso mosaico de sentimientos, combinado con ciertos aspectos perversos del catolicismo mediterráneo, produce una preo ocupación casi maniática cercana a la necrofilia, respecto a la muerte. Es costumbre argentina celebrar homenajes y servicios especiales en los aniversarios de fallecimientos, los funerales han constituido grandes momentos de la historia argentina y la controversia sobre el retor no de los restos de Rosas que descansan en Inglaterra, es aún una amarga disputa que divide a los argentinos
Una fisonomía digna de tener en cuenta es el valor que los argentinos asignan a las apariencias. El aspecto personal, con frecuen cia, es considerado como indicativo de la clase social de cada cual y por lo tanto el argentino (y especialmente el porteño) dedica cuidado su atención a su atuendo. El arreglo meticuloso es endémico. Ciertos giros del lenguaje preñados de formalidades corteses que a menudo parecen excesivas a los extranjeros son parte esencial del ritual social. Juan Perón fue indudablemente un fenómeno argentino sólo
¿Qué ofrece ese semáforo? Puede suponerse que es la oportunidad. Puede suponerse que ante esos segundos de aburrimiento que propone la luz roja, deteniendo a todos dentro de sus vehículos, aparece esa coyuntura. Están todos mirando hacia adelante, sin otra propuesta que la espera. Como una platea, frente al semáforo, se vislumbra la posibilidad: chance en la que podría nacer un artista. Unos cuántos segundos para demostrar una habilidad. Acto subsiguiente, buscar la retribución. El premio al esfuerzo del arte efímero e improvisado. Otros preferirán la renguera y el relato ex privado de su libertad; otros el balde y la propuesta casi a imperativo modo sin exhortativa amabilidad, de limpiar parabrisas o espumarlo sin enjuagar.